Monopolizacion de de los Medios de Comunicacion por el Gobierno Ecuatoriano
Desde que el Gobierno tomó posesión de varios canales de televisión, radioemisoras, periódicos y agencias de noticias, a través incautaciones y otras argucias, se fue consolidando la más grande industria de información multimedia del país, cuyo objetivo central es direccionar la opinión pública y el manejo de audiencias al compás de la propaganda política oficial.
Dentro de esta industria local de elaboración de mensajes de consumo masivo, sea a través de la publicidad, producción cinematográfica, televisiva o redes sociales de Internet, se estructuró el primer monopolio ‘mass media’ del siglo XXI, que permanece en manos del sector estatal.
Pero ¿cómo enfrentar esta gigante concentración de medios que limita la competencia en la producción de mensajes a través de la Ley de Control de Poder y Regulación del Mercado que el Ejecutivo remitirá pronto a la Asamblea Nacional?
Con cierta ironía, los expertos del sector público buscan que alguien regule las prácticas empresariales que atentan a la competencia y crean monopolios, pero se olvidan de las propiedades y la concentración de bienes del Estado. Entonces, la Semplades plantea ahora la creación de la Superintendencia de Competencias, con autonomía administrativa y financiera, capacidad reguladora para establecer sanciones, para la conducta anticompetitiva en las empresas privadas.
Sin embargo, estos científicos sociales esquivan el fenómeno de la comunicación social y la dinámica empresarial de su naturaleza. Olvidan la sofisticada industria y la producción, distribución e intercambio de los mensajes, la cual requiere de libertades y garantías en su participación económica.
Dentro de esta industria local de elaboración de mensajes de consumo masivo, sea a través de la publicidad, producción cinematográfica, televisiva o redes sociales de Internet, se estructuró el primer monopolio ‘mass media’ del siglo XXI, que permanece en manos del sector estatal.
Pero ¿cómo enfrentar esta gigante concentración de medios que limita la competencia en la producción de mensajes a través de la Ley de Control de Poder y Regulación del Mercado que el Ejecutivo remitirá pronto a la Asamblea Nacional?
Con cierta ironía, los expertos del sector público buscan que alguien regule las prácticas empresariales que atentan a la competencia y crean monopolios, pero se olvidan de las propiedades y la concentración de bienes del Estado. Entonces, la Semplades plantea ahora la creación de la Superintendencia de Competencias, con autonomía administrativa y financiera, capacidad reguladora para establecer sanciones, para la conducta anticompetitiva en las empresas privadas.
Sin embargo, estos científicos sociales esquivan el fenómeno de la comunicación social y la dinámica empresarial de su naturaleza. Olvidan la sofisticada industria y la producción, distribución e intercambio de los mensajes, la cual requiere de libertades y garantías en su participación económica.
Opinión Personal
John Narváez
Con la incautación de los medios de Comunicación por el presidente Rafael Correa no ha hecho más que manipular mas allá de visualizar la libertad de expresión y la integralidad ideológica de contenidos es clave descubrir las malas prácticas empresariales que golpean al consumidor final con productos de escasa calidad y mensajes mediocres como los que muestran la televisión y la prensa gubernamental.
Como todo mercado, los mensajes requieren ofrecer garantías y calidad para los consumidores e inscribirse en la libre competencia empresarial.
kmantilla@lahora.com.ec
Como todo mercado, los mensajes requieren ofrecer garantías y calidad para los consumidores e inscribirse en la libre competencia empresarial.
kmantilla@lahora.com.ec
Información receptada del diario la hora
Responsable
John Narváez Erazo
No hay comentarios:
Publicar un comentario